SEP 122017 México no debe ser el patio trasero de ninguna política anti-migratoria; por el contrario debe emprender acciones que respalden a los migrantes mexicanos y a los de cualquier nacionalidad que sufran vejaciones y la violación de sus derechos humanos, fueron las declaraciones que Raúl Morón Orozco externó en la tribuna del Senado de la República. El Legislador Federal incitó para que nuestro país fuera defensa y protección de derechos de los migrantes, dentro y fuera del territorio nacional, ya que dijo, ser migrante no debe ser un delito de facto, mucho menos aquellos que son menores de edad. "México debe elevar a rango de política de Estado la cuestión migratoria y asumir un enfoque humanista y de solidaridad con nuestros hermanos centroamericanos, de defensa irrestricta de sus derechos y, enfáticamente, no criminalizarlos. Sólo así tendremos la autoridad ética necesario para defender a nuestros propios migrantes" señaló. Lo anterior fue expuesto durante su participación a favor de la votación de los cuatro dictámenes presentados por la Comisión de Asuntos Migratorios y Estudios Legislativos, en los que se exhorta al Poder Ejecutivo para que cumpla con su responsabilidad de atender y mantener los programas de apoyo a migrantes en la frontera norte de nuestro país y se cuenten con los recursos necesarios para enfrentar el retorno de compatriotas a estados fronterizos. Referente al dictamen que exhorta a las entidades federativas para que se sumen a los esfuerzos de identificación, ayuda y protección de niños y adolescentes centroamericanos no acompañados en su tránsito por México, Raúl Morón coincidió en que los menores deben ser el sector más protegido tanto por las leyes como por los gobiernos y sociedades. "México debe ser solidario y, por sobre todas las cosas, cumplir y hacer que se respeten los derechos fundamentales de los menores; ellos menos que nadie, deben ser tratados como delincuentes" manifestó. El tercer dictamen por el que Morón Orozco votó a favor, exhorta al Gobierno federal a contribuir en la solución de la situación de los cubanos varados en nuestro país, "México debe cumplir con un papel de garante de derechos y de mediador activo en la resolución de conflictos entre países que generan situaciones de crisis migratoria como la que se vive entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba". Sin embargo, el Senador por Michoacán, reconoció que está pendiente un gran giro en la política migratoria: "debemos fortalecer la protección de nuestros compatriotas y revisar a profundidad las posibles estrategias para este retorno; también debemos garantizar la protección de derechos a los migrantes centroamericanos, y esto significa reconocer que en México se violan sistemáticamente sus derechos". |