Benedicto XVI abandona El Vaticano; deja de ser papa para ser un "peregrino"
Redacción IM Noticias, 28/02/2013

Benedicto XVI abandona El Vaticano; deja de ser papa para ser un "peregrino"
Desde el balcón central de su residencia en Castel Gandolfo, el papa Benedicto XVI se asomó este jueves a la plaza del pueblo para dirigir sus últimas palabras como Papa a los vecinos y fieles, a los cuales también bendijo y agradeció por sus oraciones y su amistad.

"Desde mi corazón les doy la bendición. Gracias a todos", exclamó Joseph Ratzinger, ante una multitud que lo aplaudió por varios minutos y entre la cual sobresalía una bandera colombiana. Además agregó: "ya no soy el pontífice, sino un peregrino más".

El papa Benedicto XVI llegó desde Ciudad del Vaticano a Castel Gandolfo, a más de 30 kilómetros al sur de Roma, en cuyo palacio pontificio se alojará a partir de este jueves.

Faltando cinco minutos para las cinco de la tarde de este jueves en Roma (10:55 a.m. hora colombiana), en el patio San Damacio, corazón del palacio apostólico, el papa Benedicto XVI se embarcó hacia el helipuerto.

El pontífice fue despedido por un piquete de la Guardia Suiza y sus colaboradores de la Secretaria de Estado, y en un automóvil, acompañado de su secretario, Georg Ganswein, se dirigió al helipuerto del Vaticano, construido en un lateral de los Jardines Vaticanos.

Como símbolo de respeto y admiración, en las escaleras del patio, los cardenales se despidieron de él con un beso en el Anillo del Pescador, entre aplausos, antes de subirse a su automovil Mercedes Benz.

Hacia las 11:05 a.m. hora colombiana, partió en el helicóptero de la Fuerza Aérea Italia en un viaje que no duró más de quince minutos sobrevolando la Ciudad del Vaticano y Roma.

Finalmente, como se esperaba, el helicóptero en el que viajó desde el Vaticano aterrizó en el helipuerto de la Villa Pontificia hacia las 5:24 p.m. hora local (11:24 a.m. hora colombiana), donde abordó un automóvil que lo llevó hasta la que era hasta ahora su casa de descanso en Castel Gandolfo.

Allí fue recibido por el cardenal Giuseppe Bertello, presidente del Governatorato del Vaticano (ente que gestiona el pequeño estado, del que depende la Villa Pontificia de Castel Gandolfo), y el arzobispo Giuseppe Sciacca, secretario del Governatorato.

Asimismo, estaban presentes el obispo de Albano, diócesis a la que pertenece Castel Gandolfo, Marcello Semeraro; el director de la Villa Pontificia, Severio Petrillo; la alcaldesa del pueblo, Milvoa Monachesi, y el párroco, Pietro Diletti.

Desde el momento de su partida, las campanas de las catedrales de la Ciudad del Vaticano y Roma, empezaron a repicar en homenaje al retiro del sumo pontífice.

Los patios y plazas principales de Roma se encuentran inundados de personas que quieren acompañar a Benedicto XVI en su retiro del cargo que ocupó en los últimos casi ocho años.

El pontífice papa Benedicto XVI será llamado desde este jueves "papa emérito" o "Romano Pontífice emérito" en su retiro, en el cual continuará llevando sotana blanca.