La construcción de la "Segunda Etapa del Libramiento Sur, tramo Ramal Camelinas" tendrá serios problemas geológicos que podrían afectar a cerca de 14 mil habitantes, aseguraron geólogos expertos que forman parte del Movimiento Ciudadano en Defensa de la Loma (MCDL).

En la zona conocida como "Los Filtros Viejos" localizada en la Loma de Santa María, existe una falla geológica activa denominada "La Paloma", la cual se encuentra rodeada de laderas inestables, señalaron los expertos del movimiento.

Estas laderas inestables son enormes masas de piedra y tierra que pueden derrumbarse con facilidad, adicionaron.

"La construcción de la obra puede perturbar la falla geológica ocasionando derrumbes que amenazan sepultar colonias enteras tales como: Ocolusen, La Floresta, Fray Antonio de San Miguel y Jardines del Rincón, lo cual ocasionaría la pérdida de miles de vidas humanas e incuantificables pérdidas materiales", destacó Gustavo Alcocer, vocero del MCDL.

Alcocer agregó que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), durante la proyección de la obra, no consideró el riesgo derivado de la falla geológica y laderas inestables, inclusive, no existe un estudio geológico que acompañe la manifestación de impacto ambiental del proyecto.

"Esa omisión manifiesta la despreocupación que la SCT tiene de poner en riesgo vidas humanas y pérdidas materiales incuantificables", agregó Alcocer. "Basta consultar el "Atlas de Riesgo de Morelia", difundido en la página de internet del Ayuntamiento de Morelia, para saber que en la Loma de Santa María existe una falla geológica activa y laderas inestables", destacó.

El "Atlas de Riesgo de Morelia" muestra que en el punto donde termina la calle Baltzar Echave existe una inmensa ladera inestable. "Justamente, en ese lugar la SCT tiene proyectado construir un túnel, justo en uno de los puntos más inestables de la falla de la Paloma", agregó Alcocer.

Diversos científicos mexicanos, entre ellos el renombrado geólogo de la UMSNH, Víctor Garduño, han realizado estudios de esas laderas inestables, y han concluido que el derrumbe de dichas laderas pueden desplazarse una distancia considerable, sepultando al fraccionamiento la Paloma, la colonia Bosques Camelinas, y los fraccionamientos Prados del Campestre y el Campestre.

Además, en la zona de Ocolusen sepultaría más de 500 metros, afectando a las colonias Ejidal Ocolusen, La Floresta, Periodistas, Fray Antonio de San Miguel y Jardines del Rincón, zona donde viven aproximadamente 13,904 personas, según el último censo de 2010.

Las llamadas de atención para no construir sobre la falla geológica de La Paloma no deben pasar desapercibidas, ya que de lo contrario, se corre el mismo riesgo que el acontecido con el antiguo hospital del IMSS en la Avenida Nocupétaro. Dicho edificio se construyó sobre otra de las fallas geológicas de la ciudad, no obstante los diversos estudios y llamadas de atención de especialistas para no hacerlo en esa zona.

En total omisión a esos estudios y llamadas de atención, se construyó el edificio que 25 años después fue demolido por el riesgo de desplome dado el gran movimiento de la falla y el subsuelo.

Salva la Loma no se opone al desarrollo o a la construcción de nuevas vialidades que conecten a la Loma de Santa María; con lo que no está de acuerdo es que en aras de un costoso proyecto, que solo responde al interés de unos cuantos, se afecten cientos de hectáreas naturales que representan el pulmón y la fuente de recursos acuíferos de miles de morelianos.

Para más información, ponemos a disposición de la opinión pública los videos sobre la obra: https://www.youtube.com/channel/UCS1KHwe2w5CLM-MTk-FZ9mw.