Los ex empleados de la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) descartaron se vaya levantar la manifestación del inmueble del órgano fiscalizador del estado mientras no se les dé un resolutivo claro si se les dará una liquidación conforme a la ley o se les restituye en sus puestos a los 76 empleados.

Y es que a decir del ex auditor, Héctor Cisneros, las reuniones con la Junta de Coordinación Política y la Comisión Inspectora de la ASM han sido poco fructíferas, al determinar que en su caso particular el pago por 16 años de labor es de 800 mil pesos y no de 250 mil, que fue la oferta de la última área del Congreso del estado.

Asimismo, Cisneros calificó la mesa de diálogo con la Junta de Coordinación Política como una cita infructífera, en la cual los diputados integrantes expusieron sus punto de la reestructura y reingeniería de la Auditoría, pero no dieron ninguna solución a la problemática.

Dichos cambios fueron cuestionados al asegurar conocer de la creación de 40 plazas para el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Legislativo (Stasple), sin tener nuevas áreas para dar espacios a más secretarias e intendentes, que afirmó son los espacios ofertados .

El ex empleado dijo que son conscientes del daño que se le hace a los procesos que debe seguir la Auditoría por mantenerla cerrada, pero determinó que de no haber realizado esta acción nunca hubieran obtenido la atención de los legisladores.

Aunque en la asistencia de los diputados integrantes de la Comisión Inspectora destacó la ausencia de los perredistas, Fidel Calderón Torreblanca y Erik Juárez Blanquet y mantener negociaciones solo con legisladores del PRI, Juna Carlos Orihuela Tello, Jaime Darío Oseguera Méndez y el panista, Jorge Moreno.

Finalmente, detalló que al obtener una respuesta clara en la semana siguiente se desistirá de la toma de instalaciones, donde descartó la pérdida de documentos ya que los únicos con acceso al edifico son los vigilantes.