La invasión de rutas con autos "piratas" en Ario de Rosales igual que en otros municipios de la geografía michoacana, pone en riesgo la seguridad de los usuarios; tiene que resolverse de raíz y que la autoridad retome la rectoría del transporte; las concesiones deben dejar de ser un botín político electoral.
Así lo consideró este día el dirigente estatal de la Comisión Reguladora de Transporte (CRT), José Trinidad Martínez Pasalagua al referirse a la postura de la organización Antorcha Campesina que exige concesionar a los "autos piratas" con los que invadieron rutas establecidas desde hace quince años.
Los transportistas de la CRT, de manera puntual, pagan impuestos y los seguros del viajero y cumplen con los reglamentos que exige la autoridad en la materia (COCOTRA). Saturar el estado con servicio "pirata", es un riesgo para el usuario y una competencia desleal como lo avalan los estudios que sobre el caso se han realizado dijo el líder transportista.
Y abundó en el mismo sentido, que Antorcha Campesina refiere la existencia de "monopolios" sin embargo, ellos, son el ejemplo de su dicho, con una de sus cooperativas donde rentan placas a sus agremiados bajo la condición de participar en marchas, tomas y movilizaciones en contra de los niveles de gobierno estatal y municipales y como en el caso de Ario de Rosales, la exigencia es que se concesione el "pirataje" o bloquean el servicio de los trabajadores del volante establecidos con el único argumento de su derecho a trabajar, pero sin considerar que violan los derechos de quienes de manera responsable, cumplen con los reglamentos y obligaciones fiscales, insistió el dirigente.
Por lo anterior, Martínez Pasalagua enfatizó que el gobierno del estado, debe retomar la rectoría del transporte porque la prestación del servicio no debe crecer de manera anárquica; las concesiones ya no deben de ser pagos de favores políticos ni botines electorales, enfatizó.

Finalmente, lamentó que la organización en mención, esté utilizando a señoras y niños para bloquear rutas en Ario de Rosales, situación, que significa un riesgo a la posibilidad de enfrentamientos con quienes ofrecen los servicios "piratas" y que de manera arbitraria pretenden apropiarse de las rutas establecidas.