El sueño olímpico comenzó. En un encuentro muy reñido, con altibajos para la Selección Nacional y un agónico final, el equipo argentino no pudo ante la selección africana en el Estadio Geoffroy Guichard de Saint Étienne, y cayó por 2 a 1.

El primer tiempo fue muy disputado, con un desarrollo parejo, donde, a pesar de la presión y los intentos de profundidad en sus ataques de la mano de Thiago Almada, Julián Álvarez y Lucas Beltrán, Argentina no logró hacer daño en área rival.

Apenas faltando unos segundos para la conclusión de la primera etapa, Marruecos abrió el marcador luego de una jugada colectiva y un remate potente de Rahimi desde el área chica donde Gerónimo Rulli nada pudo hacer.

A los cinco minutos del complemento, el juez sueco sancionó penal para Marruecos y el conjunto africano estiró la ventaja.

A Argentina se le hacía muy cuesta arriba el trámite del encuentro hasta que, luego de algunas aproximaciones, a los 23 minutos llegó el descuento. Julio Soler recibió un centro pasado de Joaquín García y, tras un remate cruzado Giuliano Simeone empujó la pelota y marcó el 1-2.

El juez adicionó 15 minutos. En ese tramo llegó la igualdad con un cabezazo de Cristian Medina. Inmediatamente después hubo una invasión al campo de juego por parte del público y todos los jugadores junto con el árbitro se refugiaron en el vestuario. Luego de un largo conciliábulo, los dos equipos regresaron al terreno de juego y el árbitro, antes de la reanudación, anuló el segundo gol de Argentina, a instancias del VAR, por offside. Se jugaron apenas tres minutos más y el resultado no se modificó: Marruecos venció a la Argentina 2-1.

La Selección Argentina disputará su segundo partido del certamen el próximo sábado 27 de julio ante Irak, en el Stade de Lyon.