Después de estar siete años juntos, fue el propio Brad Pitt el encargado de diseñar el anillo de compromiso para Angelina, con la colaboración lógicamente Robert Procop, un popular joyero de Beverly Hills.
El actor lleva trabajando junto a Procop aproximadamente un año en el diseño de la pieza, algo que ciertamente ha dado buenos resultados, ya que Angelina está de lo más contenta con su anillo de diamantes.
Precisamente fue la naturalidad con la que Angelina lucía la joya, lo hizo saltar las alarmas de una boda inminente, que más tarde acabó confirmando Cynthia Pett-Dante, la representante del actor.
La elección de Procop no fue casual, ya que éste ha colaborado con Angelina en su colección de joyas, por lo que conoce a la perfección los gustos de la actriz.