Después de la contundente victoria de México contra Croacia, donde la selección Azteca derrotó tres por uno a los europeos, los michoacanos salieron a las calles a desgañitarse de alegría debido al avance de los nuestros a octavos de final.

Los sitios sagrados para el festejo fueron la Fuente de las Tarascas y la Plaza de Armas, a un costado de la Catedral, donde cerca de 200 personas celebraron el triunfo de los guerreros mexicanos.

En el partido, primero llegó el gol del zamorano Rafael Márquez, un pretexto más para estar briagos de felicidad, por ser orgullosamente michoacano, después marcó Andrés Guardado y enseguida Javier Hernández "Chicharito", quien como un verdadero crack dejó "pintada" a la marca y sentenció el encuentro con gran personalidad.

Solamente un gol croata cayó en la puerta de Francisco Guillermo Ochoa, mismo que no fue celebrado por su anotador Ivan Perisic, quien agachó la cabeza y regresó al centro del campo para que de nuevo rodara el balón.

Los michoacanos contentísimos a una sola voz cantaban el Cielito Lindo, además con picardía coreaban: "Croacia ya probó el chile nacional"; mucha de esta gente disfrutó del encuentro futbolístico en las pantallas gigantes que fueron colocadas en la plaza Benito Juárez y de esta manera Morelia se inundó del color verde, el verde de la victoria y el verde de la esperanza, pues este día "El Piojo Herrera" demostró que con garra y buen juego se le puede ganar a cualquiera.