Un intento para lograr su registro como asociación religiosa acabó en fracaso para La Nueva Jerusalén, la comunidad de corte sectario que en julio pasado destruyó dos escuelas laicas.

La negativa para otorgarle el registro fue resuelta por la Secretaría de Gobernación el 6 de septiembre de 2011.

El resolutivo quedó plasmado en el oficio AR-02-P/8966/2011, emitido por la Subsecretaría de Población, Migración y Asuntos Religiosos, luego de casi tres años de gestiones.

De acuerdo a documentos oficiales, en ese expediente la Nueva Jerusalén dio aviso a las autoridades federales sobre sus actividades de culto, así como del nombre que pretenden ostentar.

La agrupación religiosa se llamará "Iglesia Católica Apostólica Tradicionalista de Nuestra Señora Inmaculada Virgen María del Rosario de La Nueva Jerusalén".

El domicilio para llevar a cabo las actividades de culto sería el templo principal del pueblo, ubicado en la calle Nuestra Señora de Luján, sin número, en la colonia Las Once Mil Vírgenes, con código postal 61680.

El encargado de realizar los trámites fue una persona identificada como Celestino Cruz Millán, con domicilio en Iztapalapa, Distrito Federal.

Sin embargo, algunas inconsistencias en la documentación ingresada en la solicitud, relativa al periodo de tiempo en que inició sus actividades de culto, echó abajo el proyecto.

En su dictamen del 6 de septiembre de 2011, la autoridad federal destacó que este trámite debe apegarse a la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público.

"La ley establece que quien abra un templo o local destinado al culto público deberá dar aviso a la Secretaría de Gobernación en un plazo no mayor a 30 días hábiles a partir de la fecha de apertura", notificó.

Además, indicó que la persona que realice el trámite deberá acreditar una experiencia mínima de cinco años en actividades religiosas dentro de la República Mexicana.

A partir de esto, en su solicitud la Nueva Jerusalén informó haber iniciado actividades de culto el 18 de octubre de 2006.

Aquí se detectó la primera inconsistencia, pues la autoridad federal tuvo conocimiento de la apertura del citado templo a partir del 24 de julio de 2008, casi dos años después.

En la revisión del expediente, la Segob encontró también que el solicitante inició sus actividades de culto a partir del 11 de marzo de 2011, por lo que no se cumple con el requisito de cinco años de antigüedad para iniciar el trámite.

Eso impidió a la Segob conceder el registro, el cual podrá revisarse nuevamente hasta dentro de cinco años contados a partir de esa fecha.

En ese supuesto, será hasta el 11 de marzo de 2016 cuando la solicitud pueda ser reactivada por el interesado.

"Con relación al inicio de las actividades religiosas por usted desarrolladas, le informo que será a partir del 11 de marzo de 2011 cuando comenzará a computarse el término de cinco años que la legislación en la materia establece para iniciar, en su caso, el trámite para la obtención del registro".

"Mientras tanto únicamente se considerará como agrupación religiosa y se identificará durante todo el tiempo que permanezca con esta calidad", dictaminó la autoridad federal.

Aunado a eso, la Segob advirtió que este resolutivo no prejuzga sobre la procedencia, en un futuro, de la expedición del correspondiente registro.

Explicó que, en su oportunidad, el solicitante deberá nuevamente dar cumplimiento a todos y cada uno de los requisitos que establece la normatividad en la materia.

A esta negativa, hasta hoy conocida, le siguió la toma de la escuela primaria y el jardín de niños en agosto de 2011.

El bloqueo a los planteles se extendió por casi un año, hasta que en julio de 2012 los dos planteles fueron destruidos por decenas de habitantes presuntamente enviados por San Martín de Tours, el líder religioso de la comunidad.

Los agresores alegaron que la educación laica es cosa del demonio y que va en contra de su culto.