El padre Gregorio López negó que la Diócesis le haya suspendido de sus funciones religiosas por seis meses y aclaró que fue él quien pidió un año sabático para realizar diversas actividades vinculadas con la labor altruista.

Dijo que su supuesta suspensión "es sólo para vender periódicos de La Voz de Michoacán, son mercenarios de la noticia." Aclaró que por no tener residencia en un lugar eclesiástico me pueden suspender y aplicar el propio canon, por lo que pidió "un año sabático".

Aseguró que este periodo inició en junio pasado y concluye en este 2015, por lo que "hasta ahora están sacando esto."

Ante lo cual sentenció: "No estoy ejerciendo el ministerio pero sí sigo siendo el sacerdote encargado de la Diócesis de Apatzingán. ¿Por qué lo pedí? Porque tengo muchas salidas. Acabo de estar en Canadá, estuve 22 días en una universidad de Estados Unidos, ahora voy a América Latina. Tengo muchas entrevistas?".

Ante tal medido, el Padre Goyo se calificó como "astuto" porque prefirió solicitar un año sabático para no ser expulsado de su ejercicio eclesiástico.

Con información de GrupoFórmula.