Participantes del Congreso Nacional de Antropología Social y Etnología, exigen al menos el 1% del PIB a la investigación científica y tecnológicaRedacción, 22/09/2012
Morelia, Mich.
Los asistentes al II Congreso Nacional de Antropología Social y Etnología se congratularon por la realización de este evento que congrego a 900 ponentes provenientes de 153 instituciones de 29 estados de la República, 17 países latinoamericanos y de otros continentes, así como por la presencia de más de mil asistentes interesados en los simposios, paneles y presentaciones realizados durante los tres días del evento.
Este II Congreso se realiza en el contexto de un México en el que los procesos de transición -caracterizados entre otros por una alternancia política cuestionada- generan cambios complejos asociados a problemas e incertidumbres graves. En la declaración del I Congreso Nacional, realizado en septiembre de 2010 en la Ciudad de México, se comunico la profunda preocupación por la violencia que aqueja la cotidianidad del pueblo mexicano. Ahora, dos años después, los participantes fueron testigos de escenarios de creciente inequidad, exclusión, vulnerabilidad, inseguridad y violencia. Como estudiosos y analistas de los grandes problemas nacionales, los antropólogos sociales y etnólogos reunidos en la Plenaria Final del Segundo Congreso Nacional de Antropología Social y Etnología consideraron conveniente pronunciarse en torno a cuatro temas presentes en numerosas mesas y debates.
1. Como científicos sociales, los antropólogos sociales y etnólogos se dijeron preocupados por el creciente deterioro físico y simbólico del patrimonio cultural de México, debido al proceso de mercantilización indiscriminado y sin control al que está sometido actualmente. Por ello, se pronunciaron por el fortalecimiento de los usos públicos y sociales del patrimonio cultural al que ha estado asociado históricamente.
2. En la generación y aplicación del conocimiento para el bienvivir de los mexicanos, como especialistas investigaron las condiciones para la reproducción social, material y simbólica de las múltiples formas en que las personas y las colectividades pueden realizarse en sociedad. Los resultados de los estudios debatidos en el Congreso Nacional ?al dar voz a la sociedad- obligan a exigir a los tres órdenes de gobierno garantizar la seguridad básica y la paz social como condiciones irrenunciables para construir una sociedad más justa.
3. Diversidad, desigualdad y globalización configuran espacios de tensiones y conflictos que, por un lado, han abierto caminos para la defensa de derechos sociales y culturales, así como para focalizar la necesidad inaplazable del desarrollo sustentable en el planeta. Sin embargo, por otra parte, han propiciado una sobreexplotación de los recursos naturales y sociales. Ante tal emergencia que daña las soberanías del Estado y la sociedad civil, por lo que reclamaron la construcción de una propuesta democrática, incluyente, y respetuosa de la diversidad cultural y del medio ambiente que favorezca la gobernanza en el país.
4. Los trabajos presentados en el II Congreso advierten sobre la importancia creciente de las ciencias sociales para contribuir a solucionar los problemas del país. Expresaron su preocupación por la poca atención que las diversas instancias de gobierno otorgan a las aportaciones de nuestras disciplinas, así como por la falta de condiciones que alienten el desarrollo de las mismas. Con base en lo anterior, y en concordancia con la Declaración de la Red Mexicana de Instituciones de Formación de Antropólogos formulada en su XXIV Reunión Nacional del 18 de septiembre pasado, se pronunciaron a favor de que el H. Congreso de la Unión cumpla con dedicar al menos el 1% del Producto Interno Bruto a la investigación científica y tecnológica y en igual proporción del mismo a la educación superior.