Pensiones son insuficientes para los afectados en el acto terrorista del 2008 en Morelia, Michoacán.

La ciudadana moreliana, Rita Alvarado Trejo dijo no recordar mucho de esa noche, sino que lo último que vio antes de perder la conciencia fue a su familia tirada en el piso y no saber de ellos hasta un mes después de ellos que reaccionó en el hospital.

Con tres hijos lesionados por el metal de las granadas y su esposo con el hueso del fémur desecho la pierna derecha, además de ella con problemas en sus pies y el nervio ciático tampoco pudieron rehacer su vida.

Aseveró que sólo dos de los integrantes de su familia reciben pensión y que esta es provisional no vitalicia como lo había prometido el ex presidente la República, Felipe Calderón Hinojosa.

Alvarado Trejo expresó que se ha solicitado extender de por vida la ayuda monetaria, pero la respuesta de la administración estatal es ha que no se puede.

Aunque dijo no poder contabilizar cuantas personas están en la misma situación recordó que hay dos de sus compañeros que les han sido amputados los pies.

Pese a que cuenta con apoyo de servicios médicos, los desinfalmatorios en el Seguro Popular que necesitan no los tienen para surtírselos, lo cual los obliga a adquirirlos por fuera.

Con dos niños en primaria y una en la preparatoria, José Ángel López Bucio, el esposo de Rita, dio a conocer que no ha podido regresar a su actividad económica que era la carpintería.

Estimó que el apoyo que recibe en particular, son 1700 pesos quincenales, dinero que dijo no alcanza para cubrir gastos de medicamentos y escuela de sus tres hijos.