Luego de tres días de conflicto, los estudiantes de la Normal de Tiripetío continúan con autobuses secuestrados y siguen atrincherados en su plantel a la espera de un posible ataque de la fuerza pública, que aparentemente no llegará ante el privilegio del diálogo que anunció el gobierno estatal.

Este jueves, los manifestantes en señal de "buena fe", liberaron un camión de lácteos, mientras dos ómnibuses con varios "Tiris" se dirigieron a esta ciudad de Morelia para después ir rumbo a Salamanca, aparentemente por refuerzos normalistas provenientes de Guanajuato.

En medio de todo, los servicios de transporte foráneos siguen paralizados, la gente como trabajadores, estudiantes y turistas siguen desviándose a centrales camioneras en los estados vecinos de Guanajuato, Guerrero y Jalisco, para poder trasladarse a sus lugares de origen o toman taxis que llegan a cobrarles cantidades estratosféricas por trasladarlos hasta donde se dirigen, lo cual merma la economía de la ciudadanía.

Los Tiris dijeron que están dispuestos a un diálogo, pero recalcaron que desean que su matrícula sea aumentada, lo cual exigen como un "dogma inquebrantable", pues dicen que son jóvenes de escasos recursos económicos que merecen ser atendidos por el gobierno, por "el derecho constitucional que tienen a la educación".

Hasta el momento no se sabe dónde vaya a parar esta "novela", pues en varias horas del día se dijo que el Grupo de Operaciones Especiales ya entraría a recuperar los vehículos secuestrados, pero todas las alertas terminaron en una "llamarada de petate".