Urge protección social para erradicar trabajo infantil: OIT
Redacción IM Noticias, 11/06/2014

Urge protección social para erradicar trabajo infantil: OIT
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) consideró hoy "indispensable" la protección social para erradicar el trabajo infantil, flagelo que afecta a 168 millones de niños en el mundo.

"No hay secreto alguno sobre lo que es necesario hacer", declaró el director general de la OIT, Guy Ryder, en un mensaje emitido en Ginebra en la víspera de que se conmemore el Día Mundial contra el Trabajo Infantil.

"La protección social, junto a la educación formal de calidad, universal y obligatoria al menos hasta la edad mínima de admisión al trabajo, el empleo decente para adultos y jóvenes en edad de trabajar, una legislación eficaz y un diálogo social consolidado, forman parte en conjunto de una respuesta adecuada al trabajo infantil", subrayó.

Según la OIT las políticas de protección social bien concebidas que respondan a las necesidades de los niños, pueden tener un impacto real en la lucha para erradicar el trabajo infantil.

De acuerdo a las últimas estimaciones mundiales del organismo laboral de Naciones Unidas entre 2008 y 2012 el número total de niños trabajadores descendió de 215 millones a 168 millones.

El Día mundial contra el Trabajo Infantil se celebrará unos días después de la publicación del Informe Mundial sobre Protección Social 2014-2015 de la OIT.

Dicho informe muestra que muchos niños no reciben las prestaciones familiares que necesitan para realizar su potencial.

Las inversiones insuficientes a favor de los niños comprometen sus derechos y su futuro, incluyendo el derecho a ser protegidos contra el trabajo infantil, señala el reporte. Los gobiernos destinan en promedio 0.4 por ciento del PIB en prestaciones familiares y para los hijos. Esta cifra varía entre 2.2 por ciento en los países de Europa Occidental y 0.2 por ciento en África y en la región de Asia y el Pacífico.

Las medidas de protección social desempeñan un papel significativo en la eliminación del trabajo infantil, reiteró la OIT. Las pensiones, así como las prestaciones por desempleo, maternidad, discapacidad y accidentes en el trabajo contribuyen a prevenir las situaciones en que los niños tienen que trabajar para complementar los ingresos familiares insuficientes o inseguros de la familia.

También cuando se ven obligados a entrar en el trabajo infantil debido a un deceso, accidente, enfermedad u otra pérdida de ingresos imprevista.

Sin embargo, a nivel mundial sólo 12 por ciento de los trabajadores desempleados reciben prestaciones por desempleo, sólo 28 por ciento de las mujeres empleadas están protegidas por las prestaciones por maternidad y sólo 52 por ciento de las personas en edad de jubilación reciben una pensión.

La cobertura de la salud que garantiza el acceso a la asistencia médica no sólo permite mejorar la salud de las personas, sino que además protege a los hogares del riesgo de caer en la pobreza debido a los gastos en la sanidad. En la actualidad, alrededor de 40 por ciento del total del gasto en salud está a cargo del enfermo.

La OIT exhortó a los 185 Estados miembros a garantizar que todas las personas tengan un acceso, al menos, a los servicios de sanidad esenciales y a una seguridad de ingresos básicos a lo largo de toda la vida.

Finalmente, la OIT destacó que el Papa Francisco se refirió al Día Mundial contra el Trabajo Infantil durante su audiencia general en el Vaticano este miércoles, advirtiendo que "decenas de millones de niños son obligados a trabajar en condiciones degradantes, son víctimas de abuso y esclavitud, acoso y discriminación''.

"Espero que la comunidad internacional extienda el acceso de los niños a la protección social para erradicar esta plaga", dijo el Papa. "Todos necesitamos renovar nuestro compromiso, especialmente las familias, para proteger la dignidad de todos los niños y niñas y ofrecerles la oportunidad de crecer en un ambiente sano'', sostuvo. "Una infancia vivida en paz permite a los niños mirar la vida y el futuro con confianza", valoró el Papa Francisco.