AGO 282013 La sección 18 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) exhortó al gobierno del estado para recobrar el principio de orden y la rectoría de la educación. La secretaria general del SNTE en Michoacán, Angélica Reyes Ávila, afirmó que se puede recuperar el orden en la educación a través de la relación institucional con la representación legal y no accediendo a chantajes y manipulaciones de diversas corrientes magisteriales como lo es la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). "Creo que corresponde hoy a la autoridad y ahí sí hemos estado exhortando al propio gobierno del Estado para que se restablezca el principio de orden en Michoacán, para que se pueda restablecer un principio de orden y se recupere totalmente la rectoría de la educación desde lo que significa la institucionalidad, creo que esto sí es fundamental", afirmó la representante del magisterio institucional. En entrevista, agregó que en a través de los últimos años se generó un gran vacío de autoridad en la Secretaría de Educación que alimentó la creación de grupos de oposición, motivo que llevó a la afectación educativa que se vive en la entidad. Este pronunciamiento del SNTE se da en medio del posible análisis del pliego petitorio que en meses pasados entregó el sindicato al gobierno del estado, en ese sentido, Reyes Ávila expresó que la firma de minutas con la Coordinadora representa un golpe a la organización sindical. "Lamentamos mucho que ante el planteamiento de un documento entregado ya hace algunas semanas, no hemos tenido con claridad esa voluntad política de podernos sentar a revisar; hoy el documento firmado, los acuerdos con la propia Coordinadora, es un golpe directo a la organización sindical legalmente constituida, por supuesto a que también exhortamos a que se tenga que demostrar ya con lecturas claras esa correspondencia precisamente de quienes estamos verdaderamente contribuyendo a de alguna manera salir de este gran rezago educativo". En ese tenor, hizo una analogía en la que se compara a la CNTE y al SNTE como el hijo bueno y el rebelde, casos en los que los padres de familia dan mayor atención a los hijos rebeldes para que cambien su conducta y, sin embargo, no se logra ningún cambio y se deja de lado al hijo bien portado. "Algún día una autoridad me decía que era un ejemplo muy didáctico, así como cuando padres de familia tenemos a un hijo que es el rebelde y el hijo bien portado, al hijo rebelde a veces como que le damos todo en la idea de que pueda ya cambiar la conducta y siempre va a seguir igual y al portadito le decimos al cabo no me dices nada, esto pareciera algo chusco, pero es algo real en el magisterio". |