| JUL 162023 El español superó al siete veces campeón Novak Djokovic por 1-6, 7-6(6), 6-1, 3-6, 6-4 tras cuatro horas y 44 minutos en una vibrante final con el No. 1 en juego, atrapando una batalla con la que conserva en su poder el trono del Pepperstone ATP Rankings. Con apenas 20 años, Alcaraz interrumpió una racha de 34 victorias del serbio en el torneo, invicto durante una década en la Centre Court, tomando un icónico testigo sobre la hierba de Londres. La cancha principal asistió a una gesta memorable construida ante sus butacas. Alcaraz, que apenas acumula cuatro torneos sobre hierba en su carrera, descifró los secretos del evento más prestigioso sobre la superficie para abrir una nueva era en la capital británica. El español es el primer jugador ajeno al Big 4 que logra conquistar Wimbledon desde la temporada 2002. En su primer duelo en una final de Grand Slam, Alcaraz y Djokovic convirtieron la hierba de Wimbledon en el epicentro mundial del deporte. Sin embargo, fue un duelo que se comenzó a jugar mucho antes de tocar el césped, con recientes lecciones bien presentes en uno de los partidos del año. El pasado mes de junio, Alcaraz comprobó la dureza de medir a Djokovic en un Grand Slam. En las semifinales de Roland Garros, sobre la arcilla de París, el murciano padeció severos calambres fruto de la tensión generada por el partido. Con esa experiencia en los hombros, y la determinación de escribir una historia diferente, Carlos saltó a la cancha enfocado como nunca. Con la misión de frenar un amenazante cambio de guardia, Djokovic diseñó un prólogo de enorme peso psicológico. El balcánico sostuvo un enérgico inicio de Alcaraz, levantando una pelota de rotura con su primer turno de servicio, antes de desplegar un manual de juego sobre hierba. En un duelo de gigantescas destrezas en el fondo de pista, la habilidad al resto permitió a Novak dominar en apenas 35 minutos el primer parcial. Alcaraz había cedido apenas seis turnos de servicio en los seis partidos resueltos camino de su primera final en The Championships. Demostrando que el partido incluía una dificultad sideral, el de Belgrado apenas necesitó un parcial para arañarle dos turnos de saque. Si el desafío no era suficientemente complicado para Alcaraz, se añadió un escalón adicional en Londres. Djokovic jamás había perdido un partido completo en Wimbledon tras cerrar el set inicial y ese era el reto que tenía por delante con apenas 20 años. La capacidad de lucha de Alcaraz afloró en uno de los escenarios más duros del deporte. El pupilo de Juan Carlos Ferrero consiguió quebrar a Djokovic para iniciar la segunda manga y apretó los dientes ante la resistencia del balcánico. Aunque Novak recuperó de inmediato la rotura, el partido elevó la igualdad a ambos lados de la red. Los puntos interminables, la flexibilidad del serbio y los golpes imposibles del español dibujaron un parcial delicioso. Los dos primeros jugadores del circuito se mantuvieron la mirada hasta el tiebreak, un territorio dominando a la perfección por Djokovic. El serbio, todo un superviviente en situaciones límite, había resuelto los últimos 15 desempates en Grand Slam. Esa pared fue aceptada por Alcaraz, capaz de levantar un 0-3 antes de cerrar la muerte súbita con un imperial resto ganador de revés paralelo. |