AGO 272024 Para Carlos Alcaraz jugar en Flushing Meadows es algo particular y distinto al resto de los grandes escenarios del Tour. En Nueva York hay chispa, diversión, y casi que pega a la perfección con su personalidad. Por si fuera poco, en el arcón de recuerdos y pergaminos, es un torneo que lo ha convertido en quien es, firmando sus primeros cuartos de final de un major con 18 años tras vencer a Stefanos Tsitsipas, conseguir su primer Grand Slam y el añorado No. 1 del PIF ATP Rankings en 2022 y las semifinales en 2023. Ahora, la realidad es diametralmente opuesta y su propia narrativa pasa por una nueva vara madurez, de dosificar emociones y de querer ir incluso por más. Abriendo la jornada nocturna del Estadio Arthur Ashe, Alcaraz se medirá este martes ante el australiano Li Tu, de 28 años y con sólo una victoria en el circuito ATP, un tenista que se alejó del tenis para enfocarse en su estudios de marketing y regresó a la competencia tras la pandemia. De momento, vaya si Alcaraz ha demostrado este año que le encantan los grandes escenarios, brillando sobre todo en los majors. El 15 veces campeón del circuito sabe que cuando su tenis fluye causa tantos problemas a sus rivales, no importa quien esté del otro lado de la red. "Creo que siempre llevo a mis rivales al límite. Intento ser agresivo todo el tiempo, jugar diferentes golpes", dijo Alcaraz en la previa. "Creo que voy a decir lo peor para mi rival, no van a saber qué va a ser lo siguiente. Tienen que ser agresivos. Tienen que defender bien si quieren estar vivos en el punto", auguró. |