MAR 302013 La decisión de Francisco, de desatender una regla de la Iglesia y lavar los pies a dos jovencitas, una musulmana serbia y una católica italiana, durante el ritual del Jueves Santo, ha sido para esos tradicionalistas la gota que derramó el vaso: una evidencia de que Francisco tiene poco o nulo interés en una de las prioridades de Benedicto: revivir las tradiciones anteriores al Concilio Vaticano II en la Iglesia. Uno de los "blogs" tradicionalistas con más lectores, "Rorate Caeli", reaccionó a la ceremonia del lavatorio declarando que había muerto el proyecto de ocho años de Benedicto para enderezar lo que el entonces Pontífice consideró interpretaciones erróneas de las reformas modernizadoras del Concilio. Un comentarista afín a esas ideas tradicionalistas en Argentina, el país natal de Francisco, es Marcelo González, quien reaccionó a la elección de Francisco con un artículo titulado "¡El Horror!" González afirmó que el actual Papa, no realizó prácticamente esfuerzo alguno como arzobispo de Buenos Aires por revivir la antigua misa en latín, una causa abrazada por Benedicto XVI y por los tradicionalistas. "Enemigo jurado de la misa tradicional, no ha permitido sino parodias en manos de enemigos declarados de la liturgia antigua", escribió González en la publicación Panorama Católico Internacional. Prácticamente todo lo que ha hecho Francisco desde que fue elegido Papa (cada gesto y decisión) ha disgustado a los tradicionalistas de un modo u otro. |