SEP 072017 Los profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) orquestaron una megamarcha la mañana de este jueves y de esta forma partieron de los cuatro puntos cardinales de la ciudad para dirigirse al Centro Histórico y hacer un mitin. Los inconformes protestaron contra las reformas estructurales y también con LA exigencia de plazas automáticas para los normalistas. En ese tenor se pudo conocer que los "centistas" se concentraron a la altura del Tecnológico de Morelia para luego avanzar por el Libramiento Revolución y llegar al distribuidor vial de la salida a Charo y así enfilar por la Calzada Madero. En tanto otro grupo se reunió en Xangari (en la salida a Pátzcuaro) para marchar por el Periférico Independencia y después enfilar por la Calzada Juárez, luego por la calle Abasolo hasta llegar a la zona centro de esta urbe. Mientras que en el distribuidor vial de la salida a Quiroga el contingente de "centistas" marchó por el Libramiento Independencia, se integró a la Avenida Siervo de la Nación, luego a la Avenida Periodismo hasta llegar a la Avenida Madero y así arribar al centro de esta población. Finalmente en la salida a Mil Cumbres los "centistas" avanzaron por la Avenida Acueducto para después llegar a la Avenida Madero y concluir en el centro. En torno a las protestas la Secretaría de Seguridad Pública dio a conocer que desplegó a la Policía Michoacán en los accesos de la capital michoacana y en los puntos de reunión de los manifestantes a fin de resguardar el orden público y evitar incidentes. También divulgó que Tránsito del Estado daría agilidad vehicular para prevenir congestionamientos. Los oficiales antimotines blindaron Casa de Gobierno con el objetivo de que no haya actos vandálicos. |
| Analistas |
 Ignacio Martínez Repetimos nuestros errores. |
 Mateo Calvillo La Pascual del Papa Francisco. |
 Jorge Álvarez Banderas Omisiones legislativas. |
 Erick Avilés Pensar en Educación. |
 Alejandro Vázquez Cárdenas Simonía, cuando lo sabrago se volvió negocio. |
 Julio Santoyo Crónica de compasión y codicia. |
