FEB 032015 Dos zafarrancho entre padres de familia, maestros y hasta antorchistas registrados el mediodía y la tarde de este martes en la escuela primaria "Juan Ortiz Murillo", ubicada en la colonia Primo Tapia Poniente, de esta ciudad, dejaron como saldo dos papás descalabrados y al menos 10 personas más con diversos golpes, de acuerdo con los datos recabados durante la labor periodística. Primero, en el regreso habitual a las aulas, alrededor de las 8:00 horas, los padres que llevaban a sus hijos a estudiar se dieron cuenta de que la primaria estaba tomada por antorchistas y un grupo de educadores, entre ellos algunos del ala democrática. Fue así que empezaron a calentarse los ánimos, pues mientras unos querían que hubiera clases los otros no lo permitían. Ya para el mediodía se dio el primer encontronazo, cuando dos papás confrontaron a las personas que tenían tomada la escuela; en ese momento fueron arrojadas piedras y "volaron" garrotazos. En ese instante los dos padres de familia fueron golpeados con palos en el cráneo y la sangre corrió; incluso uno de los heridos, el señor Daniel Quintero quedó inconsciente por unos minutos. El pequeño grupo de maestros democráticos y sus colegas antorchistas mantenían tomada la escuela para cuando terminó la primera confrontación. Después llegó una treintena de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) que trataron de mediar la situación y que lo consiguieron por un breve lapso, pues luego se desató otra gresca en la que volaron rocazos por segunda ocasión, mientras que las caras de los protagonistas recibieron puñetazos y los palos volvieron a ser el arma más efectiva para causar daño a los rivales. Hubo unos 10 golpeados de ambos bandos. Los oficiales de la SSP fueron insuficientes para contener a la multitud que participaba en la batalla campal y se retiraron a pedir refuerzos. En ese instante un camión con varios profesores, irónicamente también democráticos, arribó al plantel educativo para apoyar a los papás a recuperar la escuela; así que los antorchistas y los pocos maestros que los acompañaban fueron rodeados y sacados del recinto de aprendizaje tras una severa paliza. Posteriormente, los agentes de la SSP acudieron al llamado de ayuda de sus colegas y esta vez ya eran unos 160 efectivos con equipo antimotín, mismos que finalmente tomaron el control de las instalaciones, cuando la pelea había terminado. Ahora, las clases están suspendidas de manera momentánea, en un conflicto que unos dicen es por la no aprobación del programa Escuelas de Tiempo Completo, en tanto otros aseveran que es por los malos manejos de los recursos que llegan a la escuela primaria desde la Secretaría de Educación Estatal, pero que sin duda, lo más delicado del asunto es que en medio de todo esto los niños, su educación y su seguridad queden a la deriva, pues muchos de ellos fueron testigos de toda esta violencia, motivada por conflictos de intereses. |