NOV 142012 "Para nosotros, lo primero es la conservación de la pieza. Estaba en muy mal estado, ahora está bien", explicó Alfonso de María y Campos, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH), durante una rueda de prensa en la que se dieron a conocer los resultados de la investigación. "En segundo lugar, nos preocupaba la falta de investigación", añadió el experto, uno de los coordinadores del proyecto. Luego recordó que hace más de 100 años que no se efectuaba un amplio estudio científico sobre la supuesta corona del emperador azteca. Pese a la amplitud de la investigación, persisten las dudas sobre el verdadero origen del objeto venerado en México. Aún no se sabe si perteneció o no al emperador azteca Moctezuma II Xocoyotzin, si éste lo regaló al conquistador español Hernán Cortés y si era usado por sacerdotes en rituales religiosos. Ante la falta de claridad sobre el pasado de la corona de plumas ésta fue rebautizada como El penacho del México Antiguo, el mismo título del libro donde se publican los resultados de las investigaciones. El penacho, con dimensiones máximas de 178 por 130 centímetros, recuperó su belleza y magnificencia gracias a nuevas técnicas y tecnologías de restauración. Plumas verdes de Quetzal, rojas del pájaro espátula, de color café del vaquero, otras turquesas y azules claras de aves no identificadas, están sofisticadamente montadas en un cuerpo principal, en forma de abanico, y otro central, trapezoidal ascendente. "Las plumas eran de un gran valor, más que el oro. Eran otro ámbito de poder, de riqueza", dijo de María y Campos. "En toda la historia de México, los grandes señores se vistieron con plumas", añadió. Los objetos con plumas eran guardados como tesoros. "Obviamente, Moctezuma no usaba penacho, pero eso no quiere decir que no fuera de él esta pieza", dijo. María y Campos dijo no tener dudas de que el penacho "sí es parte del tesoro de Moctezuma". Aunque el gobierno de México busca que la corona de plumas vuelva a su territorio, por ahora está dispuesto a obtener solamente una concesión en préstamo por largo tiempo. Austria, temerosa de los daños que pueda sufrir en un transporte aéreo, rechazó una propuesta de llevarlo en avión a México, por lo que ahora se trabaja en la posibilidad de transportarlo vía marítima, explicó Lilia Rivero Weber, Coordinadora Nacional de Conservación de México. Penacho: Suntuosidad & Pasión, es el título de la exposición en torno a esta corona, que en 1596 apareció inventariada en un legado del Archiduque Ferdinand II. "Hoy es un gran día de alegría", resaltó Sabine Haag, directora de los Museos de Historia del Arte, de Etnología y del Teatro de Viena. Recordó que el penacho ha estado medio siglo bajo la protección de esa colección de la dinastía de los Habsburgo. Ello probablemente lo ha salvado de la destrucción o pérdida, como han sufrido otras preciosas piezas que los conquistadores de América llevaron a Europa. Hoy es el objeto más famoso del Museo de Etnología de la capital austríaca. A partir de este jueves se podrá ver el penacho en exposición permanente, junto a otras piezas provenientes de Mesoamérica, de los siglos XV y XVI. |