JUN 242015 Son ya quince días del inicio del conflicto agrario entre Nahuatzen y sus vecinos de Sevina; la tarde de este martes, el párroco Francisco Martínez Gracián, sin lugar a dudas el más influyente en la región Purhépecha, fue bajado de su camioneta con lujo de violencia y golpeado por un grupo de encapuchados quienes lo relacionan por intervenir en el conflicto comunal. Como lo hemos manejado de manera puntual y exclusiva, el miércoles 10 de junio se recrudeció el conflicto por la disputa de lindero de tierras; un grupo de habitantes de Sevina, encabezados por el comisariado de Bienes Comunales reciben a balazos a un grupo de habitantes de Nahuatzen, cuando llegaban a verificar la remarcación de linderos pero presuntamente más de mil 400 hectáreas dentro de los terrenos de Nahuatzen. Los días subsiguientes hubo secuestro e incendios de patrullas y una retroexcavadora; se hizo una zanja en la carretera que une a ambas poblaciones distantes un kilómetros y desde entonces no hay paso para ambos lados. Se ha tratado de llegar a un acuerdo en la mesa de negociación pero no hay acuerdo; se estableció una tregua hasta este miércoles a las 12 del día en que nuevamente funcionarios del gobierno del estado, Sedatu y procuraduría agraria, se reúnan y presenten los estudios técnicos del lindero a fin de llegar a un acuerdo pacífico. Pero la tarde de este martes, el párroco Francisco Martínez Gracián, fue agredido a golpes luego de que lo bajaron de una camioneta Tacoma color blanco a la altura del entronque de la carretera a Arantepakua; algunos testigos intervinieron a su favor. Los agresores huyeron, pero esta situación vuelve tenso de nuevo el conflicto. |