JUL 142024 Inaugurada en 2016, el proyecto ha logrado atraer a turistas y visitantes nacionales a internacionales que han vivido de manera segura esta atracción mientras recorren el lago de Pátzcuaro, recordó la Secretaría de Turismo de Michoacán (Sectur), dependencia encabezada por Roberto Monroy García. De lunes a domingo de 12 a 17 horas, este atractivo se encuentra abierto al visitante que llegue a la isla proveniente del muelle de Pátzcuaro, y después de subir las escaleras de la isla rumbo al monumento a José María Morelos, encontrarán el acceso para comenzar el recorrido que dejará una grata experiencia. El costo por persona es de 350 pesos, lo cual incluye el arnés, casco y la seguridad de vivir esta adrenalina de trasladarse por el aire entre las islas Janitzio y Tecuena, así como el regreso en lancha al punto de partida. "El aventurero recorrerá 1.3 kilómetros a una velocidad de 130 kilómetros por hora. Ellos llegan de una isla a otra en aproximadamente 1 minuto con 20 segundos. Esta experiencia la vivirán de una manera completamente segura pues el cable de la tirolesa puede soportar hasta cuatro toneladas, además de que estamos el equipo capacitado para la tranquilidad de los asistentes", señaló José Brandon Calderón Guzmán, auxiliar de Turismo del Concejo Comunal de la Comunidad en la isla de Janitzio. Calderón Guzmán señaló que las infancias también se pueden subir, siempre y cuando vayan acompañados de un adulto, "y además se firma una carta responsiva. Para mayores informes sobre la tirolesa y vivir esta atracción en el Alma de México, los interesados pueden solicitarla en la cuenta de Facebook: Janitzio, Michoacán, México". Además de la tirolesa, los turistas y visitantes podrán disfrutar en la isla de Janitzio, de una vista única del Lago de Pátzcuaro, así como ingresar al monumento a José María Morelos, el recorrido en lancha para la isla, la gastronomía y las artesanías. |
| Analistas |
 Ignacio Martínez Repetimos nuestros errores. |
 Jorge Álvarez Banderas Omisiones legislativas. |
 Erick Avilés Pensar en Educación. |
 Alejandro Vázquez Cárdenas Simonía, cuando lo sabrago se volvió negocio. |
 Julio Santoyo Crónica de compasión y codicia. |
