ENE 222014 Sería "ingenuo" pensar que se conseguirá la paz total de manera inmediata en la región de Tierra Caliente, donde los habitantes sufren los estragos del desempleo en medio de la inactividad de los sectores productivos, afirma Miguel Patiño Velázquez, obispo de la Diócesis de Apatzingán. Evidenció que los apatzinguenses están luchando por la supervivencia ante el constante desplome de la economía local. Sostiene que la "gente" se ha levantado en contra del crimen organizado al no encontrar respuesta por parte de las autoridades pertinentes en sus distintos niveles. "Los que deben entrar no entran, algunos de los que tienen la autoridad en los pueblos están coludidos y eso no está bien, por eso levantamos la voz", reitera el pastor católico a los medios de comunicación. Analizó que las guardias comunitarias no tendrían razón de ser sin la existencia del grupo delictivo de los Caballeros Templarios, célula que se ha caracterizado por causar daño mediante robos y asesinatos. Patiño Velázquez hizo énfasis que las autodefensas están integradas por personas dispuestas a defender sus familias a costa de sus propias vidas y patrimonios, por lo que descarta se trate de agrupaciones interesadas en promover una "guerrilla" sin motivo. "Vivimos en Michoacán y somos michoacanos, vivimos en el municipio y no podemos vivir, no podemos trabajar, no podemos comer y entonces está duro y difícil el asunto", analiza el obispo con más de 30 años al servicio de la feligresía de Tierra Caliente. Aclara que la Diócesis de Apatzingán expuso las problemáticas relacionadas con el narcotráfico y el cultivo de mariguana desde los años 80 a través de dos cartas pastorales, época en que todavía no existía una "organización" como tal de las bandas delincuenciales. "Me extraña que algunos digan que hasta ahora la Iglesia ha hablado y eso no es cierto, en la provincia también se ha hablado y nos han asesinado a cinco sacerdotes", recalca. El obispo considera que los diferentes segmentos de la sociedad, incluyendo a la propia Iglesia, son responsables del crecimiento de dicho conflicto en el estado de Michoacán. Además de denunciar las irregularidades, el católico también reconoce que se perciben ciertos avances con la puesta en marcha de la estrategia conjunta entre los gobiernos estatal y federal, toda vez que se logró instaurar orden público al evitar más quemas de negocios y bloqueos carreteros. Comentó que tras el paso del tiempo se sabrá con precisión sobre los posibles nexos de las autoridades policiacas del Ayuntamiento, quienes en este momento son sometidas a procesos de evaluación y capacitaciones fuera del municipio. |
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