JUL 152012 "Bienvenidos a mi pueblo, somos un pueblo penitente. Aquí vienen personas de muchas partes para pedirle ayuda a la Virgen Santísima María del Rosario", esas fueron las primeras palabras de Plácida, habitante de la Nueva Jerusalén, quien se encontraba en la entrada de esta comunidad al momento en que arribamos al lugar. Plácida nos explicó que ella llegó a la Nueva Jerusalén desde San Luis Potosí. Portando un vestido largo y velo y acompañada de una niña, ella nos dio la bienvenida y nos habló un poco de su fe. Y es que este sábado el secretario de gobierno, Jesús Reyna, visitó este lugar para hablar con el obispo Martín de Tours sobre los sucesos violentos que se vivieron en días pasados, en los que habitantes de la comunidad destruyeron la escuela laica. Al momento de nuestra llegada comenzamos a tomar fotos y videos de la entrada al lugar, fue entonces cuando llegaron algunas mujeres y niños. Plácida pertenece al grupo de los creyentes que siguen al obispo Martín de Tours. Después de escuchar a Plácida y agradecerle su recibimiento, nos acercamos a un grupo de mujeres que no portaban su atuendo completo, una de ellas no llevaba el velo (que es obligatorio en las mujeres). "Silvana, es mi nombre", aseveró la mujer sin velo, quien a pesar de la lluvia no se fue y charló con nosotros. Ella nos explicó que es originaria del Estado de México y que ha vivido ahí desde que tenía poco más de un año de edad, prácticamente, toda su vida. Explicó que llegó ahí porque su padre llevó a su familia a ese lugar debido a su fe en la virgen. Sin embargo, Silvana nos comentó de su sentir en torno a la destrucción de la escuela, expresó que es necesario que los niños estudien y explicó que se vive un ambiente de cierta tensión entre la población. El grupo al que pertenece ella es el grupo de los disidentes, llamados así, debido a que no respetan las normas del lugar, creadas por los mismos líderes religiosos que, cabe mencionar, no son reconocidos por las autoridades eclesiásticas. Silvana expresó que las personas como ella son víctimas del rechazo por no cumplir con el reglamento, reconoció que existe fanatismo entre los habitantes de la zona y cuestiona el por qué no permiten que los niños no reciban la educación laica, sin necesidad de tener que ir a una escuela parroquial (en las que religiosas enseñan a los niños a leer y escribir, y que no tienen validez ante la Secretaría de Educación). Después de charlar con las mujeres, llegó el secretario de gobierno, quien se coordinó con el encargado del orden, Cruz Cárdenas, para poder hablar con el obispo Martín de Tours. Un ambiente de pueblo solitario y desolado, así como de rumores que brotan del resultado de un grupo de fieles que cuestionan el por qué sus hijos no tienen derecho a una educación laica, el por qué la autoridad no sanciona a los responsables de la destrucción de una escuela y que a su vez están amenazados por las personas que siguen al pie de la letra el reglamento que está plasmado en la fachada de su catedral. "Nos dicen que la virgen dice que correrá sangre", aseguró Silvana, al expresar algunas de las amenazas con las que considera se quiere intimidar a los disidentes. Un pueblo tranquilo y de paz Al entrar a la Nueva Jerusalén, acompañamos al secretario de gobierno a la oficina del encargado del orden, Cruz Cárdenas, quien fue el encargado de gestionar la reunión con Martín de Tours. Ahí, el encargado del orden justificó la destrucción de la escuela a los medios de comunicación y expresó que una posible solución para el problema de la Nueva Jerusalén sería que el gobierno valide las escuelas parroquiales. Contrario a las versiones encontradas que se escuchan en dicha comunidad, el encargado del orden afirmó que la Nueva Jerusalén es un lugar tranquilo, calificó dicha localidad como un pueblo de paz, sin problemas y expresó que lo que sucedió con la escuela que destruyeron los creyentes de la Virgen del Rosario fue que el pueblo se sintió humillado cuando el gobierno entregó la escuela sin consensar antes entre la población. "Para un aula en un pueblo, hay que tomar en cuenta al pueblo, debe de haber mayoría", expresó. Agregó que el día de los hechos él no se dio cuenta debido a que salió a Morelia y agregó que las escuelas parroquiales con las que se cuenta son suficientes para que los niños estudien. "Lo que pasa es que hay servicios, aquí no hacen falta escuelas, aquí hay varias escuelas, tenemos una escuela aquí que tiene 12 aulas", aseveró Cruz Cárdenas. Las personas que pertenecen al grupo denominado como disidente han afirmado en días pasados que son víctimas de amenazas y que inclusive se les ha hecho saber que podrían ser expulsados de la comunidad. Ante esta situación el encargado del orden afirmó que no se tiene contemplado expulsar a nadie y lo único que se pide es el respeto a los usos y costumbres del lugar, además de que expresó que las personas que supuestamente han recibido amenazas deben de tener más claridad y saber quién las hizo, ya que el gobierno puede investigar al respecto, sin embargo consideró que son mentiras. La reunión Después de ser recibido por el encargado del orden, el Secretario de Gobierno se reunió con Martín de Tours. Sin embargo, las mujeres que entramos a la Nueva Jerusalén tuvimos que cambiar nuestro atuendo, ya que la forma en que vestimos no está permitida en esta comunidad. Cornelia, una mujer de la comunidad y dos de sus compañeras nos apoyaron al prestarnos faldas largas y velos, mientras nos hablaban de su fe en la Santísima Virgen María del Rosario y nos decían qué hacer al momento de entrar en la catedral y diócesis de la Madre de la Nueva Jerusalén, en donde Reyna se encontraba con el líder religioso. La reunión duró poco más de una hora, y sin embargo no se nos permitió el acceso hasta que la misma concluyó, mientras tanto en ese tiempo conocimos más del lugar en el que había niños que pedían escuelas, mientras que otros afirmaban que les enseñaban a rezar, leer y escribir solamente, o simplemente se intimidaban con las preguntas y sonreían. Al momento de terminar la reunión y una vez las mujeres ataviadas con faldas y velos y los hombres con gorras para ocultar su cabello largo, el cual tampoco está permitido, se nos permitió el acceso a la catedral, que aún está en construcción y en la que sobresale un altar dedicado a Papá Nabor, fundador de la Ermita. Mujeres orando a la virgen, mientras un grupo de danzantes bailaban la danza de los viejitos y los padres veían y nos observaban y procuraban que no tomáramos fotos del altar dedicado a su virgen, eran los elementos que contrastaban con el silencio que se vive en las calles del lugar, en donde nunca se nos permitió hablar con Martín de Tours. El padre Marcos Durante nuestra visita, un padre del lugar, el padre Marcos fue cuestionado sobre las amenazas hacia los disidentes, sobre todo en el sentido de que la virgen afirma que correrá sangre, a lo que él respondió entre risas, que esos comentarios se escuchan debido a que se está conmemorando el mes de la preciosísima sangre de Cristo Nuestro Señor. Afirmó que la destrucción de la escuela no se realizó bajo amenazas que obligaran a los habitantes a destruir el plantel: "cada quien tiene derecho a su derecho, cada quien tenemos nuestros derechos, pero mi derecho se va a acabar donde empieza el de usted. Yo tengo derecho a defender mi derecho", expresó. Agregó que las autoridades religiosas del lugar no incitaron a los habitantes a actuar de tal manera, pero también justificó los actos vandálicos al afirmar que esa escuela pública no cumplía con el reglamento. "Lo que pasa es que aquí no podía haber, en cuanto que no se obedecieron los reglamentos, se les dijo muchas veces y se les entregó el reglamento a los maestros, al mismo gobierno se entregó, el gobierno sabía ya los reglamentos como estaban, los papás de familia no respetaban, ahí comenzó también un problema muy fuerte con los papás de familia que empezaron a quebrantar el reglamento como la moda indecente, esos mismos padres de familia demostraron una rebeldía en cuanto a vender bebidas embriagantes, todo eso provocó al pueblo este caos", aseveró. Expresó que la autoridad gubernamental es quien tiene que pedir permiso a la comunidad para poder llegar a instalar un plantel educativo, además de que éste debe cumplir con los aspectos del reglamento de la comunidad, lo cual es contradictorio, ya que el padre reveló que la virgen, desde que se fundó el lugar, pidió que no existiera escuela laica. "El que quiera cumplir con ese reglamento aquí estará y el que no quiera cumplir este reglamento se va a ir", agregó. Agregó que no importan los costos de las situaciones con tal de respetar el reglamento y su religión: "Por defender la obra de la santísima virgen no importa, vamos a la cárcel, damos nuestra vida porque tenemos que salvar el mundo perdido, el mundo está perdido", expresó. |