JUL 042013 El pasado martes, los gobiernos de Francia, Italia y Portugal negaron la posibilidad de aterrizaje -que se requería sólo por razones técnicas, para recarga de combustible- e incluso el cruce por los espacios aéreos de esos países, del avión oficial que transportaba al Presidente Evo Morales, de Bolivia, en viaje de Moscú a La Paz. Los gobernantes de Francia, Italia y Portugal supusieron que en el avión presidencial boliviano viajaba como polizonte Edward Snowden, ciudadano norteamericano, (quien se ha visto obligado a permanecer y "permanece" hasta hoy en Moscú) que es requerido por la represión política hecha justicia de Estados Unidos. Habría que decir a Francois Hollande, a Enrico Letta, Aníbal Cavaco Silva y a Pedro Passos Coelho, como dice el refrán: "que el león cree que todos son de su condición, pero que el Presidente de Bolivia no acostumbra transportar polizontes". Debiendo hacer todos los arreglos diplomáticos y técnicos ya en el aire, con riesgo de vida del Presidente, sus acompañantes y la tripulación, el avión del Presidente Morales hizo escala en Viena, sin problema alguno, como debía ser, con el gobierno respetuoso del derecho y de los principios de la amistad de Austria. De ahí, el día de hoy, prosiguió su viaje a Bolivia. El hecho es de muchísima gravedad: Los gobiernos de Francia, Italia y Portugal mantienen relaciones diplomáticas con el de Bolivia. Entre esos gobiernos europeos y el sudamericano no parece existir ningún conflicto que hubiera conducido a una decisión como la que aquellos tomaron. Los gobernantes de Francia, Italia y Portugal han violado la Convención de Viena, que da inmunidad a las naves de los jefes de Estado, han faltado así a los más mínimos compromisos de respeto y amistad con un gobierno y con una nación con los que mantienen relaciones y pusieron en riesgo, con pleno conocimiento, por un asunto que les debía ser ajeno, la vida del Presidente Evo Morales y los colaboradores que viajaban con él. Los más altos gobernantes de Francia, Italia y Portugal han ofendido seriamente a los pueblos francés, italiano y portugués. Han mostrado una servil y rastrera actitud para servir la represión ideológica y al intervencionismo de los Estados Unidos. Han mostrado que no respetan el derecho y que no merecen se les respete. Los pueblos de Francia, Italia y Portugal no pueden sino sentir vergüenza por esos gobernantes que inclinan la cerviz ante el poder imperial. Centro lázaro cárdenas y Amalia Solórzano, A. C. Cuauhtémoc Cárdenas. Presidente. México, D. F., 3 de julio del 2013. |