MAR 192013 El presidente Enrique Peña Nieto intercambió un solideo blanco con el papa Francisco, siguiendo una antigua tradición católica según la cual todo fiel que se acerque con esa indumentaria recibirá una similar de parte del Papa. Enrique Peña Nieto pudo saludar al papa Francisco junto al altar mayor de la Basílica de San Pedro, acompañado por su esposa Angélica Rivera y 2 de sus hijas, después de la misa de inicio de pontificado en la cual participaron unas 200 mil personas. Personalidades de todo el mundo estrecharon este martes la mano a Jorge Mario Bergoglio, el primer pontífice latinoamericano, como parte de las 132 delegaciones oficiales que asistieron a la toma de posesión. Al momento del saludo a los jefes de Estado, el papa Francisco recibió a la delegación mexicana con la cual intercambió frases durante varios minutos, todo en español. En un momento la consorte acercó el solideo y al verlo, el papa Francisco se quitó el suyo, concretando el intercambio. Según anunció el propio Enrique Peña Nieto, en este momento de cercanía lo invitó a visitar México lo antes posible, en una cortesía que fue considerada como una invitación oficial. Previamente, Enrique Peña Nieto asistió a la ceremonia de inicio del ministerio petrino del nuevo obispo de Roma, Francisco, sin recibir la eucaristía. Enrique Peña Nieto arribó acompañado por su esposa Angélica Rivera a las 8:50 horas a la explanada del patio central de la Plaza de San Pedro, en donde fueron acomodados en el lugar de honor para los jefes de Estado y Gobierno. Con tiempo suficiente antes de que iniciará la misa, Enrique Peña Nieto y esposa saludaron a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner; a los príncipes de Asturias, Felipe y Letizia; y al presidente del gobierno de España, Mariano Rajoy. |