ABR 152019 Y es que, Pedrito sigue siendo el máximo ídolo del pueblo mexicano, un icono de la cultura popular cuyas películas y canciones permanecen vivas en el corazón del público, trascendiendo entre generaciones. De ahí que esta mañana, como cada año desde entonces, habrá tertulia en el Lote de Actores del panteón Jardín donde reposan sus restos, y un gran número de cantores le entonarán ante su tumba el Amorcito corazón y los Cien años, entre otras de sus muchas grabaciones. Se calcula que a lo largo de su carrera, que inició en 1939, participó en más de 60 filmes erigiéndose en gran estrella de la Época de Oro del Cine Mexicano, y, desde 1943, grabó más de 300 canciones de diversos géneros, mostrándose igual como un romántico bolerista que como un cantante bravío, genuino exponente de la música tradicional mexicana. Mucho se habla y se escribe de este hombre que falleció a los 39 años de edad en aquel trágico accidente de avión ocurrido el 15 de abril de 1957 en Mérida, Yucatán; aunque también se especula ahora que fue víctima de un complot fraguado por un político celoso, y hasta se afirma que en realidad no pereció en el avionazo y que vivió bajo la falsa identidad de Antonio Pedro. Son múltiples los episodios de la leyenda que se ha venido forjando en torno a la mítica figura de Pedro Infante a través del tiempo, lo otro cierto es que, a 62 años de distancia de su desaparición física, el artista oriundo de Mazatlán que se inició tocando la batería en una orquesta, adquirió visos de fenómeno social debido a su talento, su carisma y la penetración que consiguió al tocar las fibras más sensibles de un pueblo que, sencillamente, continúa extrañándolo y le rinde tributo en cada uno de sus aniversarios luctuosos. Llama la atención el hecho de que aun cuando sus fieles admiradores ya se fueron, los públicos modernos lo conocen y compran sus películas, lo mismo que sus discos remasterizados o incluso en la piratería, generando jugosas ganancias económicas, además, con la venta de tequila, afiches y toda clase de productos que "huelan" a Pedro Infante. Y ese fenómeno social también se debe a la imagen del mexicano alegre, pícaro y enamorado y al héroe urbano que representó en el cine, interpretando una gran variedad de personajes en cintas como Nosotros los pobres, Ustedes los ricos, A toda máquina, Pablo y Carolina, Los gavilanes, Dos tipos de cuidado, Los tres huastecos y muchas más. Es imposible no recordarlo en las películas que filmó, dando vida a aquel hombre seductor, de campo, caballero varonil, detallistas y, sí, también mujeriego, que se quedó en la memoria de miles de mujeres que soñaban con tener a su lado a alguien como él. Aunque en estos tiempos esa descripción no suena muy convincente, durante la época dorada del cine mexicano, Pedro Infante Cruz era la figura que representaba al varón mexicano y que se volvió fascinación de miles de mujeres. |