NOV 292021 "A fin de cuentas, todas las ciencias terminan dependiendo de la reacción química, y eso le da una fortaleza central: por un lado es muy útil, porque la potencia y la vuelve importante; pero por otra, implica una responsabilidad muy grande, pues lo que los químicos debemos aprender es variadísimo", afirmó el director de la Facultad de Química (FQ) de la UNAM, Carlos Amador Bedolla. En ocasión del Día del Químico, que se conmemora el 1 de diciembre, señaló que los cerca de 250 profesores-investigadores de tiempo completo de esa entidad académica explotan toda la gama de conocimiento de esta disciplina. A ese grupo se suman cerca de 100 profesionales del Instituto de Química y otros que están repartidos en diferentes dependencias universitarias como los institutos de Física, Investigaciones en Materiales, Fisiología Celular, Investigaciones Biomédicas, Biotecnología, de Ciencias Aplicadas y Tecnología y las Facultades de Ciencias y Medicina. Amador Bedolla consideró que los retos de la Química son mundiales, y entre ellos destacan de manera importante el cambio climático (cuya investigación y tratamiento requiere centralmente conocimientos en la materia), la disponibilidad de energía (con la posibilidad de utilizar las renovables con eficiencia), así como los temas de salud y de farmacia (donde hoy sobresalen las vacunas y los antibióticos). Consideró que México tiene que aprovechar el potencial científico que posee en beneficio de la sociedad. "Tenemos los conocimientos y la capacidad, y nos está faltando la creación del entorno completo que nos permita aprovecharlos". Un análisis a fondo de los grandes retos de esta disciplina se analizarán en un libro que se publicará para celebrar los 105 años de la FQ, que comenzarán el Día del Químico y oficialmente se cumplieron el 23 de septiembre, pues ese día de 1916 se fundó la Escuela Nacional de Ciencias Químicas, hoy Facultad de Química de la UNAM. Amador Bedolla señaló que el Día del Químico es la fecha en que ese gremio tiene la oportunidad de reunirse para identificarse y reconocerse como una comunidad importante, fuerte, trabajadora y generadora de todo tipo de resultados para nuestra sociedad. "Tiene una influencia amplia que va desde la ciencia más pura hasta la aplicación más industrial", destacó. El funcionario estimó en más de 100 mil los químicos en México, de los cuales entre una décima y una quinta parte se dedican a la ciencia básica. En tanto, la entidad universitaria ha formado más de 40 mil egresados en 100 generaciones, además de las cinco que aún estudian. En la década de 2010 a 2020 logró 29 patentes concedidas y 62 en trámite. "En la Facultad de Química mantenemos y fomentamos el contacto con las empresas y con la aplicación económicamente activa de nuestra profesión. Siempre hay una buena fracción de nuestros estudiantes que se dirigen a la industria, aunque quedarse en investigación es una decisión personal y también impulsamos los estudios de posgrado y la especialización en investigación", comentó Amador Bedolla, para quien es muy importante encontrar la combinación de ambos campos. |