SEP 152023 Con una inversión conjunta de 730 mil pesos, se realizó la reparación de la parte frontal del monumento histórico que data del siglo XVIII, antiguas instalaciones del Seminario Tridentino de San Pedro, así lo informó la encargada de la política cultural en el estado, Tamara Sosa Alanís. Detalló la intervención de 187 metros cuadrados de ignimbrita (toba volcánica), mejor conocida como cantera rosa, así como el portón sur original del inmueble, de los cuales se removió la materia depositada y perjudicial como el polvo de extintor y productos de combustión. Se devolvió al portón sus cualidades estéticas y de seguridad, así como su funcionalidad al postigo oriente, la estabilidad de la madera para el trabajo mecánico y el volumen original, sumado a los tratamientos de conservación preventiva. Sobre el resto de la fachada, se removieron restos de pintura de la superficie, deposiciones y restos de geles. El Colegio Seminario funcionó sin interrupción hasta el año de 1811, en que fue clausurado a causa de la guerra de Independencia, haciéndose su reapertura en el año de 1819 debido al empeño de don Ángel Mariano Morales, después Obispo de Sonora y de Oaxaca. En el siglo XIX, el entonces gobernador Epitacio Huerta, decretó la extinción del Seminario Tridentino y pasó a la posesión del Poder Ejecutivo. En 1863 fue devuelto a la Iglesia bajo el Gobierno del emperador Maximiliano de Habsburgo, pero cuatro años después se devolvería como sede del Poder Ejecutivo, principalmente, según la tesis de maestría Constructores de Valladolid de Michoacán en el siglo XVIII del ahora maestro Carlos Núñez Chávez. Entre 1874 y 1889, albergó una biblioteca pública con más de 15 mil volúmenes, los cuales posteriormente serían trasladados al Colegio de San Nicolás. Ahí también fue la sede del Museo Michoacano por algunos pocos años hasta 1892. En algún otro momento de su historia alojó simultáneamente a los Poderes Ejecutivo y Legislativos del Estado de Michoacán (Ojeda Dávila, 2016). |