FEB 132016 Con lágrimas en los ojos, la señora Guadalupe Hernández agradece que el Sumo Pontífice visitara tierras mexicanas. "Lo vi y él me vio, es un sentimiento muy hermoso, valió la pena esperarlo con tanto frío", dijo la mujer, mientras abrazaba una fotografía de Francisco. Como ella, cientos de personas se veían felices, saludando o tomando fotografías y videos para tener un recuerdo del Sumo Pontífice. El grupo de personas que colaboraron en las vallas olvidó su función y corrieron para intentar seguirlo; sin embargo, el papamóvil no se detuvo en ningún momento. |