ABR 282024 En una jornada repleta de sol, con un ritmo de pelota mucho mayor que en jornadas anteriores, el español se adaptó a unas condiciones que domina como pocos. Si la arcilla permite un partido de ritmo creciente, la habilidad del español luce con brillo propio. El No. 3 mundial manejó con templanza un partido incierto, derrotando por 6-3, 6-3 al brasileño Thiago Seyboth Wild para tomar velocidad en el torneo. Con el objetivo de ir recuperando la dureza de su derecha, mermada por la lesión muscular sufrida antes de la temporada de arcilla, el pupilo de Juan Carlos Ferrero se regaló un partido de progreso. Aunque todavía no sea posible desbordar a los rivales a base de potencia, uno de los pilares de su juego, el vigente campeón empezó a recuperar el tenis directo que lo ha llevado a la cima. "Quizá hoy tenía algo de nervios de ver cómo iba a ser. Al final, Thiago pega muy duro a la bola y no sabía cómo iba a aguantar el antebrazo", respondió el español durante la entrevista en pista, confirmando unas sensaciones de mejora evidentes en su nivel de juego. "Hoy para mí ha sido la prueba de fuego, no he notado ninguna molestia. Me he sentido espectacular y he conectado unos golpes de derecha muy buenos para mí. Así que, a partir de ahora, vamos a ir para arriba". |