| AGO 122023 La puesta en escena de la UD Las Palmas en Primera tuvo dosis de paciencia y vocación de asumir la batuta del partido. El equipo de García Pimienta capturó de inmediato el balón y lo distribuyó con abundantes pases frente a las ordenadas líneas baleares, generando un modelo de encuentro absolutamente reconocible para sus aficionados. Había que tener calma para no cometer errores y, además, encontrar fisuras hasta donde llegar a las proximidades del portero Rajkovic. El porcentaje de posesión para los amarillos se acercó al 80% en ese primer sector del encuentro, aunque sin descubrir los huecos en la muralla roja que tenía enfrente. Sin embargo, en el minuto 21 se registró un serio susto en el área grancanaria. Una pelota en profundidad del equipo visitante la aprovechó Dani Rodríguez para chutar en el área y enviar el balón al poste derecho de Álvaro Valles. Ese instante de incertidumbre no alteró el guión en la calurosa tarde para la UD Las Palmas, que de inmediato repuso su maquinaria de juego en dirección hacia la portería de la Grada Curva. Y encontró el gol en una jugada de riesgo para la defensa visitante. Sandro penetró hasta el área y colgando un balón, pero el zaguero Copete pisó el pie de apoyo del atacante. La Sala VAR advirtió a García Verdura sobre la infracción y, tras revisión de la jugada, el colegiado catalán señaló un penalti que Viera transformó con un disparo inapelable en el 1-0. La ventaja en el marcador pudo esfumarse 10 minutos después, cuando el colegiado catalán señaló una falta similar de Kirian a Amath en el área grancanaria. En esta ocasión, la decisión fue adoptada por el juez deportivo en el campo de juego y Muriqi fue el encargado de ubicarse frente a Valles a once metros. Sin embargo, el disparo del delantero kosovar lo rechazó el larguero y el marcador se mantuvo hasta el descanso con ventaja para los futbolistas locales. En el comienzo del segundo periodo, Álvaro Valles se hizo gigante en su posición de retaguardia. Morlanes encontró un pase profundo en el minuto 51, pero el meta de La Rinconada le negó el gol con una tapada de su puño y letra. La afición de la Grada Curva premió la intervención de su portero titular. El tanto del definitivo empate llegó en una de las especialidades baleares. A la salida de un córner, en el minuto 69, Raillo cabeceó el balón colocándolo lejos del alcance del portero. El gol balear devolvió el encuentro al punto de partida. Las Palmas restableció tras el 1-1 el escenario de juego que requería para tener opciones en el tramo final. En el 78 Sandro encontró un balón en el área, pero su disparo salió mordido. Fue el mejor momento para recuperar la ventaja, pero se esfumó junto al poste. Y también el Mallorca siguió generando inquietud en sus jugadas de córner. Sin embargo, el tanteador no se movió y el reparto de puntos fue firmado en el acta de la primera sesión. |