ENE 192015 "Le di dos millones de pesos a Jesús Zambrano (entonces presidente del partido). Salió miserable, el compa", comentaría a varios perredistas el ahora preso alcalde Iguala. Para ningún perredista en Iguala es un secreto cómo fue que José Luis Abarca se hizo de la candidatura por la presidencia municipal. Era boquiflojo. Eso lo llegó a decir en diversos encuentros, cuentan integrantes del PRD de amplia solvencia moral y trayectoria partidista, quienes pidieron no revelar sus nombres, pues sus vidas corren peligro en Iguala, donde aún opera el cártel Guerreros Unidos, al que pertenecían Abarca y su mujer. Hasta antes de caer, en sus dos años de administración sus principales adversarios internos (Justino Carvajal y Arturo Hernández) fueron ejecutados, 20 simpatizantes de éstos también y van más de 53 cadáveres extraídos de fosas clandestinas cerca del ayuntamiento. Abarca alardeaba sobre su llegada a la máxima silla del ayuntamiento en octubre de 2012, al sacar del camino a Oscar Díaz, quien resultó ganador de la encuesta que el partido estrenaba como método para superar las crisis eternas durante las elecciones abiertas. Como premio de consolación, la dirigencia del PRD dio a Díaz una diputación local. Jesús Zambrado no ha tardado en exigir derecho de réplica ante la contundente publicación y calificó de infamia la nota sobre el pago de 2 millones de pesos que recibió de José Luis Abarca a cambio de darle la candidatura a la presidencia municipal de Iguala y afirmó que demandará judicialmente a quien resulte responsable. "Falsa la información de @ElFinanciero_Mx Es una infamia contra mi persona. Exijo derecho de réplica e iniciaré demanda judicial por infamia", publicó en su cuenta de Twitter a las 7:30 horas. |