| ABR 122025 Un lugar que el mundo lo ha mantenido como un monumento casi intocable para tratar de entender que toda la infamia con olor a muerte que cayó ahí no la olvidemos. Acuden grupos de niños en determinadas áreas, jóvenes, pero lo más somos adultos y personas mayores, de la tercera edad. Su nombre es Auschwitz, un campo de concentración de la segunda guerra mundial donde los alemanes tenían prisioneros a los judíos localizado en Polonia a unos cuantos kilómetros de Varsovia, un lugar donde la muerte tocaba la puerte por ejecución directa, por cansancio, por hambre, por el maltrato, pero hay que destacar que con un poco de suerte se podría sobrevivir. Muy cerca existía otro campo de concentración en un lugar llamado Birkenau, aquí solo se llegaba en tren con un destino inexorable: la muerte. los polacos y los alemanes han intentado tener en pie esos lugares como fieles testigos de cómo la humanidad pudo haber llegado tan lejos, donde el asombro y el espanto se apoderan de cada uno los que nos atrevemos a ingresar a esos lugares. A todos los que llegamos a esos lugares nos produce sin duda sea del lugar del mundo donde lleguemos una profunda tristeza, recuerdo que la palabra "malditos" la repetí no se cuantas veces al caminar por sus calles, sus pasajes, los edificios aún en pie, los lugares donde dormían los judíos, donde sufrían y donde esperaban pacientemente el momento de su muerte. Listas de internos, itinerarios de sus viajes, protesis, maletas, anteojos, cabellos, juguetes, zapatos de adultos, zapatitos de niños permanecen como mudos testigos del terror nazi. Hace apenas unos días cuando vi que en Jalisco se encontraron diversos objetos de gente que presuntamente habría sido ejecutada, inmediatamente llegó a mi memoria las vitrinas de Auschwitch, nunca pensé que esa locura se repitiera a unos cuantos kilómetros de mi tierra. Aún no está claro si en ese lugar el crimen organizado mexicano, entrenaba a grupos de jóvenes o adultos para enseñarlos a matar y morir. Nuestro gobierno federal ni siquiera le ha dado la importancia que tiene porque eso "dañaría la imagen del que gobernó México el sexenio pasado" ese que tanto grito a todos los vientos que en México no pasaba nada. Dicen muchos que se descubrió el lugar en septiembre de 2024, es decir, cuando aún gobernaba el hombre mejor informado, que todo lo sabía. Los jóvenes reclutados forzosamente para acudir a este campo de adiestramiento de un cártel eran entrenados y luego enviados al ‘frente de batalla', señala el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco. Cuantos michoacanos llegaron a ese lugar de aquellos que han sido desaparecidos por ejemplo en el oriente del estado? No debemos normalizar esas situaciones de violencia en el país, al hacerlo estamos firmando una sentencia de muerte como humanos. Ojalá y el gobierno de México gobierne para los vivos y también para los muertos. No debemos olvidar el nombre de Teuchitlán. No nos convirtamos en una sociedad salvaje e indiferente aunque parece que muy poco nos falta para ni siquiera reconocer esos indignos hechos. |